Está demostrado que los niños que reciben buenos cuidados durante el primer año de vida tienen más posibilidades de disfrutar de una vida equilibrada y sentirse realizados.
Los niños pequeños necesitan tener apego con una figura adulta que les proporcione seguridad, normalmente este es con la madre. El apego o vínculo afectivo con la madre o con el adulto a cargo de él permite al niño sentirse seguro y le ayuda a manejar la ansiedad que representa cualquier situación desconocida. El apego se desarrolla de los 0 a los 5 años de vida y este se va a reflejar en las relaciones que tenga durante nuestra vida adulta.
La falta de apego prolongado entre los 6 meses y los dos años puede causar problemas emocionales severos.
John Bowlby autor del libro «A Secure Base» ,fue el primer psicólogo en estudiar y explicar la teoría del apego. Este video me pareció muy significativo para entender los diferentes tipos del apego.
Un punto importante en la teoría del apego es que la dependencia que tiene el niño pequeño, un día debe transformarse en independencia. Cuando el niño siente el apoyo de los padres, se refleja en seguridad y esto hace que intente cosas nuevas.
El apego no significa darle al niño todo lo que quiere, significa mandarle al niño el mensaje de «aquí estoy, te escucho y te apoyo».
Para desarrollar un apego saludable, aprende a comunicarte con tu hijo, hazlo sentir escuchado y apoyo, responde a sus necesidades, pero no le resuelvas todo. Dedícale tiempo de calidad, de esta manera van a lograr crear esta conexión especial que durará para todo la vida.
«The propensity to make strong emotional bonds to particular individuals [is] a basic component of human nature” – John Bowlby